Artículo de Tim Ryan, presidente de PwC Estados Unidos, publicado originalmente en medium.com

El cambio parece estar en la cabeza de todo el mundo, prácticamente la totalidad de los líderes empresariales con los que he tenido la oportunidad de charlar en los últimos meses están embarcados en la transformación digital de sus empresas. Desde los CEO y consejeros delegados, hasta los directivos e inversores, todos coinciden en que el cambio y la transformación digital son fundamentales para crecer y crear valor a largo plazo.

También está claro que muchas empresas saben qué hacer, pero no cómo hacerlo.

Pero, ¿realmente estamos enfocándonos en la capacidad de liderazgo necesaria para impulsar el cambio en todos los niveles? ¿Nos enfocamos en todos y cada uno de las aspectos del proceso de transformación?

Transformar empresas tradicionales en digitales

Hay dos tipos de empresas: las tradicionales y las digitales. La mayoría, incluida PwC, son tradicionales, compañías que han existido durante décadas, han construido marcas sólidas, tienen una gran liquidez y cuentan con profesionales muy valiosos.

Debido a que las compañías tradicionales han existido durante algún tiempo, que con frecuencia han crecido a través de fusiones y adquisiciones, generar cambios y transformaciones puede ser difícil debido a los sistemas y procesos antiguos, así como a las capas de complejidad. Las empresas digitales están menos cargadas de dicha complejidad, lo que les permitirá ser más ágiles.

Para que las compañías tradicionales sean competitivas, deben cumplir con las demandas de valor, experiencia digital y costo. Aquellos CEO y empresas con capacidad y cultura de cambio rápido, serán ganadores de una mayor cuota de mercado, siendo aún más relevantes en el largo plazo.

Gestionar el cambio

Cuando hablo con otros CEO y directivos sobre transformación digital, suelen estar enfocados en las nuevas tecnologías disruptivas, al tiempo que se preocupan por la participación en el mercado. Pero aparentemente, algunos líderes están teniendo dificultades para ir más allá de estos temas básicos.

Lo que falta en algunas organizaciones es una discusión de cómo exactamente se impulsará el cambio. Por alguna razón, muchos no quieren admitir lo que todo mundo sabe y que está en casi todos los libros de negocios: las compañías tradicionales están diseñadas para mitigar los riesgos y, por lo tanto, son lentas ante el cambio.

Visión y ejecución deben ir siempre de la mano, sin miedo a discutir los conflictos concretos que habitualmente surgen en cualquier proceso de cambio. Estos deben ser previamente identificados y convenientemente debatidos.

Algunas cosa que los CEO deben tener en cuenta

  • ¿Está invirtiendo el tiempo necesario para explicar a su equipo las expectativas y riesgos? Con demasiada frecuencia, los CEO asumen que su gente ha entendido lo que quiere. Las mejores iniciativas en las empresas son las que cuentan con un liderazgo claro y permanente por parte del CEO.
  • ¿Está permitiendo que los líderes de los diferentes niveles rediseñen el proceso de cambio? Si no se proporciona una guía clara consistente con lo que se espera, aumenta el riesgo de que marginalicen el proceso de cambio y transformación.

Y los comités de dirección

  • ¿Su CEO está implicado en los detalles del proceso de transformación? ¿Ha invertido el tiempo necesario para saber lo que realmente sucede?
  • ¿Habla sobre cómo realizar el cambio o se limita a articular su visión? ¿Su CEO ha identificado los potenciales conflictos que surgirán como resultado del cambio?
  • ¿Cómo se monitorean el prograso y los resultados del cambio, así como las inversiones realizadas para apoyar los esfuerzos de cambio?

No olvidemos la perspectiva de los inversores:

Los inversores entienden mejor que nadie la importancia de que las cosas se lleven a término realmente. Por lo general, son los que preguntan si la administración se centra en hacer que el cambio suceda y si tiene la capacidad de ejecución. Para ellos, una transformación digital exitosa se traduce en mayor valor para la empresa, por lo está muy pendientes de los objetivos y los plazos, y evaluarán la gestión basándose en estas métricas.

CEO, cambio y confianza

En un mundo de disrupción constante, los CEO ganadores serán aquellos que sepan liderar a sus organizaciones en continua evolución. Hacerlo, les exigirá centrarse en lo realmente importante y no tener miedo a los conflictos potenciales. Estos líderes tendrán que centrarse en la ejecución y en participar en todos los aspectos del proceso de cambio y transformación.

En esencia, el cambio tiene que ver con la confianza. ¿Por qué los empleados o las empresas van a cambiar su forma de trabajar si no están obligados a ello? El cambio supone hacer algo diferente hoy para obtener un mejor resultado mañana. Así que la única manera de que los empleados lo hagan es tener la confianza en que la persona que lidera su organización traerá un futuro mejor. Y la confianza, como el cambio, no se puede delegar ni externalizar. Hay que predicar con el ejemplo y esforzarse para que   suceda, el camino no siempre es fácil, pero el premio vale la pena.

Fuente https://medium.com/pwc/when-leading-digital-change-ceos-arent-always-having-the-right-conversations-1bec00a7722c